José W. Rosasco era Mayor del Ejército Argentino. Había formado entre las primeras promociones de oficiales que realizaban pruebas de vuelo en lo que conocemos como los "pioneros de la aviación Argentina". Supo formarse políticamente y adherir sin disimulo a las ideas fascistas. No al modo en que lo entiende la historiografía corriente: un simple accionar autoritario, pero sí al modo original del ideario, con un sentido social, patriótico y tan antiliberal como anticomunista. Fue asesinado en Avellaneda el 11 de junio de 1931 por un comando anarquista.
(Puede leerse el relato en el libro de Hernán M. Capizzano, Presencia Fascista en Argentina, Memoria y Archivo, Buenos Aires, 2013).